El fin del soporte de Microsoft a Windows XP se acerca, ¿qué opciones tenemos?
Aunque Microsoft lleva tiempo advirtiéndolo, es posible que aún haya usuarios que no sean conscientes que Windows XP dejará de tener soporte a partir del próximo 8 de abril. Tras 12 años con nosotros, este sistema operativo pasará a considerarse obsoleto y Microsoft dejará de ofrecer actualizaciones, parches de seguridad e, incluso, dejará de ofrecer la descarga de Microsoft Security Essentials para XP.
Si aún sigues usando Windows XP en tu PC creo que es importante que tengas en cuenta la fecha del 8 de abril. Aunque Microsoft promete que, aunque llegue el fin del soporte de Windows XP, ofrecerá a los usuarios algunas pautas y consejos sobre seguridad; la realidad es que también nos invita a que migremos, preferiblemente, a Windows 8.
Particularmente, creo que no es recomendable mantenernos en un entorno obsoleto; llegará un momento en que iremos perdiendo el soporte del resto del software que tenemos instalado. Por ejemplo, Google ya anunció que en abril de 2015 dejaría de ofrecer soporte de Google Chrome para Windows XP y, poco a poco, nos iremos encontrando con situaciones similares con el resto de proveedores de aplicaciones.
Por tanto, con el fin de soporte de Windows XP creo que debemos asumir que se nos viene una migración de sistema operativo.
Migrar sí, pero ¿a dónde?
Microsoft prefiere que demos el salto a Windows 8 aunque, dependiendo del hardware de nuestro equipo, tampoco le parece mala idea que demos el salto hacia Windows 7.
Si optamos por dar el salto a Windows 7 deberíamos revisar si nuestro equipo cumple los requisitos mínimos que indica Microsoft; es decir, 1 GB de RAM para instalar la versión de 32 bits (2 GB de RAM en la de 64 bits) y un procesador con una frecuencia de como mínimo 1 GHz. Honestamente, creo que estas especificaciones se quedan algo cortas y un hardware más realista sería a partir de 1,5 GB a 2 GB de RAM como mínimo (si no queremos tener una experiencia de uso extremadamente mediocre).
En el caso de plantearnos un salto a Windows 8, los requisitos mínimos de hardware que plantea Microsoft son simulares a los de Windows 7; es decir, 1GB de RAM y un procesador de 1 GHz. Sin embargo, la realidad es que si quieres poder trabajar de una manera más o menos fluida, tu equipo debería contar con 2GB de memoria RAM y un procesador de 2 GHz.
De todas formas, hay mucha vida más allá de Windows y el ecosistema del software libre nos puede ofrecer una segunda vida para nuestro PC sin que tengamos que invertir en licencias o en ampliar el hardware: un sistema Linux nos ofrece un entorno de trabajo intuitivo y fácil de manejar.
Con Windows XP termina una era de casi 12 años de sistema operativo; de hecho, a día de hoy sigue siendo el segundo sistema operativo más utilizado en el mundo aunque sus días están más que contados.